Por su parte, el consumo de productos para el cuidado de la piel también crece, un 3,9%. Junto con estas cifras alcistas, la farmacia el canal que más ha aumentado sus ventas. En este contexto, fedefarma acerca este nuevo servicio a sus farmacias socias con herramientas de análisis y recomendación específicas para cada cliente, junto con soportes informativos y comerciales, para que facilitar que estas farmacias puedan ofrecer un asesoramiento en dermocosmética especializado, individualizado y de calidad, además de potenciar el consejo farmacéutico y una atención profesional y de confianza también en este ámbito.
De este modo, fedefarma proporciona a sus socios herramientas como una guía para la correcta implantación del servicio, la cual contiene protocolos para afrontar las consultas más frecuentes sobre dermocosmética, orientación para la óptima gestión de esta categoría, además de información sobre formulación y productos, entre otros. Otro de los elementos con los que cuenta esta novedad es un dermotest para el análisis del estado de la piel del cliente y conocer su rutina de belleza diaria, información a partir de la cual el farmacéutico puede orientarle sobre el tratamiento que más se adapta a sus necesidades. Según su perfil, además, al cliente se le entrega postales consejo y tarjetas de muestras, incluidas en el servicio.
El material de Dermoconsejo: belleza y salud está diseñado para poder ser complementado con un dermoanalizador, dispositivo especializado que permite medir diferentes parámetros de la piel de manera sencilla y obteniendo los resultados rápidamente, ayudando así a incrementar la satisfacción del cliente. A través de un acuerdo de fedefarma con Microcaya, la cooperativa facilita la compra de estos instrumentos a aquellas farmacias que lo necesiten.
Gracias a esta nueva solución, las farmacias que dispongan de ella podrán orientar a sus pacientes sobre su nivel de hidratación, el tipo de piel, el fototipo, si existen manchas que requieren un seguimiento…, entre otros. Pero, más allá de esta información y la del tratamiento más adecuado, con este servicio, la farmacia se adapta al cliente de la categoría dermocosmética al poder proporcionarle la experiencia de compra y consejo profesional que éste busca para satisfacer sus necesidades.
Un nuevo servicio que, a través de este refuerzo del papel sanitario del farmacéutico, además incide en el incremento del tráfico de clientes atraídos por un trato personalizado, así como en la fidelización de estos, favoreciendo la diferenciación de estas farmacias como primera opción de salud y bienestar.
