Aunque el sector español de medicamentos genéricos se ha visto estancado en los últimos años y sus precios reducidos continuamente, nuestra prioridad, así como la del resto de agentes implicados en la cadena de suministro de medicamentos, ha sido, es y será, dar respuesta a las necesidades sanitarias que esta pandemia está provocando. La salud de nuestra sociedad está en juego.
El principal objetivo de la Asociación Española de Medicamentos Genéricos (AESEG), desde el primer momento, es colaborar con el gobierno y administraciones públicas para asegurar el abastecimiento de los medicamentos en general y el de los genéricos en particular, tanto en el entorno de asistencia del COVID-19 como para el resto de las patologías y dolencias. Igualmente, y muy importante, garantizar la seguridad de los trabajadores de todas las compañías asociadas a la patronal.
Ante esta emergencia sanitaria los medicamentos genéricos, una vez más, se han mostrado como una “red de seguridad” para el Sistema Nacional de Salud (SNS) que garantiza el acceso a los tratamientos de manera costo eficiente. El genérico actúa como regulador del precio en el mercado de los productos que terminan el periodo de exclusividad de patente haciéndolos más accesibles para la sociedad y contribuyendo a la sostenibilidad de nuestro sistema sanitario.
Actualmente, y como muestra de nuestro compromiso con la salud de las personas, los laboratorios de medicamentos genéricos estamos trabajando a pleno rendimiento para garantizar la producción y suministro de fármacos a todos los hospitales y oficinas de farmacia del país. En esta línea, y para garantizar su abastecimiento, hemos adoptado distintas medidas en coordinación con el Ministerio de Sanidad y la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), y colaboramos estrechamente con la distribución, la farmacia hospitalaria y las oficinas de farmacia de nuestro país. A nivel internacional, mantenemos también un contacto continuo con Medicines for Europe como asociación europea. Un esfuerzo conjunto que busca superar esta grave situación cuanto antes. Con este objetivo, hemos realizado también numerosas donaciones de material de protección a los profesionales sanitarios y estamos colaborando y ofreciendo todo el apoyo a las autoridades sanitarias en las líneas de investigación abiertas para tratar el COVID-19.
Si tuviéramos que enumerar las principales aportaciones de nuestro sector durante la actual crisis sanitaria podríamos resumir que:
Los medicamentos genéricos han demostrado ser una potente “red de seguridad” que ha garantizado la disponibilidad y el acceso a los tratamientos requeridos tanto en hospital -UCIs y tratamientos de pacientes ingresados en planta- como en oficinas de farmacia en los tratamientos crónicos y agudos.
La industria española de medicamentos genéricos ha redoblado esfuerzos para poner a disposición del sistema sanitario los fármacos necesarios en el tratamiento del COVID-19. En particular los laboratorios farmacéuticos de genéricos han llegado a multiplicar por diez la producción de algunos de los productos críticos necesarios en los tratamientos de las UCIs como cisatracurio, propofol, midazolam, fentanilo, cloroquina e hidroxicloroquina, demostrando su compromiso y capacidad productiva al existir, incluso, un elevado nivel de desabastecimiento de algunos productos a nivel mundial.
Alrededor del 70% de las 383 presentaciones farmacéuticas declaradas esenciales por la AEMPS para el tratamiento del Covid-19 disponen de medicamento genérico y de ellos, el 96% tiene un precio inferior a 10 euros.
Además de en el ámbito hospitalario, la pandemia también ha impactado de manera puntual y excepcional en el segmento de las oficinas de farmacia, multiplicando por cinco el crecimiento de los medicamentos genéricos pasando del 3% en febrero de 2020 al 14% en marzo. Ante esta emergencia la industria del genérico ha respondido positivamente gracias a la agilidad, cercanía, esfuerzo de fabricación y disponibilidad de stocks de seguridad facilitando los productos necesarios para garantizar el acceso a los tratamientos crónicos y agudos. Gracias al esfuerzo de muchos, ningún paciente ha tenido que interrumpir su tratamiento aún en los momentos más críticos.
No obstante, la urgencia y el crecimiento de mercado excepcional alcanzado por la pandemia ha obligado a las compañías de medicamentos genéricos a asumir costes extraordinarios de fabricación sobrevenidos, viéndose obligada a multiplicar el esfuerzo de producción con un incremento de los costes directos (principios activos, productos intermedios, gestión y disponibilidad adicional de recursos humanos en producción y logística) y costes indirectos (incremento del coste de EPIs, transportes de materia primas, productos terminados, etc.) sin variar el precio que en algunos casos ya se encontraba en unos niveles mínimos de rentabilidad. Los 13 centros de producción de medicamentos genéricos situados en España han incrementado su capacidad de producción a pesar de las dificultades y los costes extraordinarios de fabricación a los que ha tenido que hacer frente.
En este sentido, nos gustaría poner en valor el trabajo conjunto que estamos realizando con las distribuidoras y las oficinas de farmacia, prestando especial atención al control de los picos de demanda. De hecho, las segundas han tenido un papel fundamental como interlocutoras entre fabricantes y pacientes, y les han hecho entender la importancia de retirar medicamentos de uno en uno (en vez de tres en tres, como permitía el sistema de receta electrónica) para no comprometer el abastecimiento.
Por otro lado, las compañías de medicamentos genéricos participan en la investigación clínica de nuevas indicaciones en el tratamiento del COVID-19 suministrando los medicamentos necesarios para la realización de ensayos clínicos de estas nuevas indicaciones para asegurar evidencia científica en nuevos usos.
Las compañías de genéricos han demostrado al Gobierno y a las administraciones sanitarias su gran capacidad, disponibilidad y efectividad de abastecimiento en esta pandemia y, por tanto, la ventaja y oportunidad que supone para España contar con un sector industrial potente como el nuestro. De ahí la importancia de fomentar, hoy más que nunca, medidas que garanticen la libre participación de todas las empresas en la fabricación y suministro de medicamentos genéricos, y la necesidad de erradicar medidas restrictivas de participación como las “subastas” u otras vías de exclusividad.
Los laboratorios de medicamentos genéricos han ayudado también en acciones colaborativas contribuyendo a través de donaciones al suministro de materiales de protección EPIs, medicamentos para ensayos clínicos y tratamientos o donación de alimentos y material de higiene para los sectores más desfavorecidos.
Por todo ello y a modo de “lecciones aprendidas” podemos concluir que ahora más que nunca es necesario apostar y promover la producción española para no depender de terceros países. El sector de los medicamentos genéricos en España es un sector industrial potente, comprometido con el empleo originando más de 30.000 puestos de trabajo directo e indirecto y contribuyendo de manera positiva al PIB. De hecho, 7 de cada 10 medicamentos genéricos consumidos en España se fabrican por compañías farmacéuticas de genéricos con planta de producción en nuestro país. Por ello, contamos con una magnífica plataforma para una mayor implantación del genérico en España después de 22 años de inversiones y dedicación industrial.
Los medicamentos genéricos son parte de la solución para combatir los desabastecimientos y evitar riesgos futuros de suministros de fármacos y garantizar el acceso. El gobierno y las instituciones sanitarias deben poner en valor la industria de medicamentos genéricos como sector estratégico y esencial en España a través de un plan específico de desarrollo comprometido con seguir realizando mayores inversiones en nuestro país, siempre que se den los estímulos e incentivos industriales necesarios.
Dado el bajo nivel de precios del medicamento genérico, las administraciones sanitarias y económicas deberán desarrollar una política farmacéutica correcta que aseguren unos umbrales mínimos de rentabilidad y que garanticen que las empresas farmacéuticas sigan apostando por el desarrollo y puesta en el mercado de estos medicamentos, como medida esencial para asegurar el acceso, abastecimiento y eficiencia en el sistema.
El nuevo escenario que esta grave situación ha creado es, además de un desafío para nuestro sistema sanitario, una oportunidad para nuestro sector. Debemos utilizar el sentido común y construir un futuro juntos porque la industria farmacéutica de medicamentos genéricos y los laboratorios innovadores se complementan, y lo hacen de un modo que nos beneficia a todos. Somos muchos los que lo entendemos así, pero hay que seguir trabajando en esta línea. Por el bien del propio Sistema Nacional de Salud y, por ende, de nuestra salud.
