Las herramientas y el conocimiento científico actuales ya permiten anticiparse y saber cómo influirán determinadas variantes genéticas en la respuesta de cada individuo a diversos tratamientos. Disciplinas como la farmacogenética y la farmacogenómica (FGx), especializadas en la relación entre genética y fármacos, deberán ser clave en la puesta en marcha de la Estrategia Española de Medicina Personalizada (MP) anunciada por el Ministerio de Ciencia e Innovación el pasado mes de septiembre.
La Sociedad Española de Farmacogenética y Farmacogenómica (SEFF) junto a la European Society for Pharmacogenetics and Personalized Therapy (ESPT) han publicado un posicionamiento sobre la necesidad de la implantación de la FGx en la cartera de servicios básicos del Sistema Nacional de Salud (SNS) siguiendo las recomendaciones del informe del Senado1. Asimismo, pone su experiencia a disposición de las autoridades españolas en este momento clave para el futuro del SNS. “Desde la SEFF prestamos todo nuestro conocimiento al servicio de la Estrategia Española de MP, porque entendemos que la farmacogenética y la farmacogenómica deben constituir pilares clave en el futuro de nuestra sanidad”, ha señalado el presidente de la SEFF, el Dr. Adrián Llerena, que es a su vez director del Instituto Universitario de Investigación Biosanitaria de Extremadura (INUBE) y del proyecto MedeA del Servicio Extremeño de Salud.
Tanto la farmacogenética como la farmacogenómica estudian cómo las variables individuales de una persona pueden influir en su respuesta a determinados fármacos. La optimización del tratamiento farmacológico ha sido uno de los factores que ha contribuido a la mejora de la salud de las sociedades contemporáneas, es un pilar en la salud que ha ido incrementando su relevancia en el gasto sanitario. Este incremento en el uso de fármacos y consiguientemente de sus asociaciones ha implicado un aumento de las Reacciones Adversas a Medicamentos (RAMs) y de fallos en la respuesta esperada. Parte de las RAMs y fallos terapéuticos son prevenibles y evitables mediante la incorporación de la farmacogenética a la Cartera Básica de Servicios del Sistema Nacional de Salud. Por tanto, la SEFF considera que no estaría justificado que estas disciplinas no sean pilares clave de la nueva Estrategia Española de Medicina Personalizada. “Solo así lograremos ejercer una medicina más precisa, más personalizada, eficiente y sostenible, cuestiones que son de especial relevancia para la sostenibilidad de los servicios sanitarios públicos”.
“Ya en 2019, el informe de la Ponencia de Estudio sobre Genómica del Senado[1] señalaba que la futura estrategia de Medicina Personalizada debería abordar la variabilidad en la respuesta a fármacos de los pacientes en base a sus perfiles genéticos y moleculares”, recuerda el presidente de la SEFF, si se trata de llevar a la práctica del Sistema Nacional de Salud las recomendaciones del Senado, y la Estrategia Española de Medicina Personalizada debería ser el marco adecuado para ello.
La SEFF agrupa a centenar de especialistas de diferentes disciplinas científicas (farmacología clínica, farmacia hospitalaria, genética, biología…), que analizan lavariabilidad genética en la respuesta a los tratamientos farmacológicos en hospitales públicos y centros de investigación de todo el país. “Somos una sociedad científica multidisciplinar y entre nuestros objetivos están asesorar a las autoridades y gestores para que la farmacogenética y la farmacogenómica guíen la política científica en España en los próximos años”, defiende el Dr. Llerena.
Ambas disciplinas constituyen un recurso imprescindible para establecer relaciones de causa-efecto entre las variantes genéticas y la eficacia, toxicidad y/o reacciones adversas a los medicamentos. Como recuerda la SEFF en su posicionamiento, en la actualidad existe ya un amplio número de fármacos aprobados con recomendaciones farmacogenéticas de utilidad clínica, establecidas por las Agencias del Medicamento de España, Europa y Estados Unidos (AEMPS, EMA y FDA, respectivamente), los Consorcios Internacionales de Farmacogenética (CPIC, DPWG, RNPGx) o bien por su nivel de evidencia científica (PharmGKB).
“Puesto que la incorporación de nuevas guías farmacogenéticas crece de forma progresiva, están avaladas por las autoridades sanitarias y abarcan medicamentos utilizados en todo el espectro de patologías médicas, desde la SEFF entendemos que esta disciplina es un recurso de uso inexcusable en la buena práctica de la prescripción médica”, señalan los miembros de esta sociedad.
La SEFF tiene entre sus objetivos, no sólo instar al cumplimiento de las directrices marcadas por la propia sociedad relativas a la homologación de técnicas aplicables, control y garantías de calidad de las mismas, y en general a todo cuanto se refiera al uso de técnicas farmacogenómicas con fines asistenciales; sino, además, contribuir colaborando con organismos públicos e instituciones privadas para el desarrollo científico, técnico y la protección jurídica de la farmacogenética y la farmacogenómica, y por último a su implementación en el Sistema Nacional de Salud.
Por todo ello, la SEFF subscribe en su posicionamiento las conclusiones de la Ponencia del Senado sobre Medicina Personalizada y para dar cumplimiento a la recomendación recogida en el punto 11, se ofrece para diseñar y colaborar en todas aquellas iniciativas dirigidas a su desarrollo, poniendo a disposición de la Administración la dilatada experiencia profesional de todos sus miembros especialistas.
