La enfermedad cardiovascular (ECV) es la principal causa de muerte en todo el planeta, de hecho, cada año fallecen 7,9 millones de personas por esta enfermedad, tanto de enfermedades cardiacas como cerebrovasculares, y se estima que la cifra ascenderá a 23 millones en el año 20301.
Las personas con diabetes tienen un mayor riesgo cardiovascular. Aunque la mayoría de los pacientes con diabetes tipo 2 (DM2) no tienen enfermedad cardiovascular establecida,pueden tener de 2 a 4 veces más riesgo de sufrirla, un dato que se incrementa entre las mujeres2,3,4. Por ello, y ante esta situación, Lilly pone en marcha la iniciativa #Hasta4VecesMás con el objetivo de concienciar sobre los eventos cardiovasculares que sufren las personas con diabetes, así como en la importancia de conocer cómo prevenirlos.
La iniciativa, que se centra en el entorno digital y difundido desde la cuenta @LillyES, muestra a dos personas aparentemente iguales planteando la pregunta sobre cual de ellas tiene mayor riesgo de desarrollar un evento cardiovascular. Para evitar estos riesgos, se ha compartido en lilly.es recomendaciones para reducir el riesgo cardiovascular en las personas con diabetes.
La diabetes es una enfermedad silenciosa, por ello es fundamental la prevención, el diagnóstico precoz, así como la educación diabetológica del paciente y de su familia, puesto que su conocimiento y su tratamiento incide en la esperanza y calidad de vida de los pacientes.
“Los pacientes con diabetes tipo 2 corren un enorme riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares, por eso es fundamental que pongan en marcha, en su día a día, una serie de consejos y de rutinas para prevenirlas”, ha apuntado el Dr. Ignacio Conget, de la Unidad de Diabetes y jefe del Servicio de Endocrinología y Nutrición del HospitalClínic de Barcelona.
Cinco consejos para disminuir estos riesgos:
- Consume una dieta sana. Una dieta equilibrada es fundamental. Se recomienda abundantes frutas y verduras (que contienen fibra y vitaminas que ayudan a mejorar la glucemia), reducir el consumo de grasas y azúcares, tomar bebidas que contengan pocas calorías y el alcohol con mucha moderación5,6.
- Practica ejercicio. Al menos 30 minutos diarios de actividad te ayudarán a mantener el sistema cardiovascular en forma5. 60 minutos casi todos los días de la semana te ayudará a mantener un peso normal.
- Controla tu tensión arterial. La hipertensión suele ser asintomática, pero es una de las principales causas de infarto de miocardio. Controla tu presión arterial y, si presenta valores altos, aumenta el ejercicio físico y cambia a una dieta con menos sal. También es posible que necesites medicación para controlarla5.
- Vigilar los niveles de glucemia. El exceso de azúcar en la sangre (diabetes) aumenta el riesgo de infarto de miocardio y accidentes cerebrovasculares. Si tienes diabetes, es muy importante que se controles el peso, la tensión arterial y los niveles de azúcar5.
- Controla los niveles de colesterol. El aumento del colesterol en la sangre incrementa el riesgo de infarto de miocardio y accidentes cerebrovasculares. Asegúrate de seguir una dieta saludable y, si fuera necesario, medicamentos apropiados5.
- Suprime el tabaco. No solo aumenta las posibilidades de desarrollar eventos cardiovasculares. El riesgo disminuye después de dejar de consumirlo y ¡se puede reducir a la mitad en tan solo un año!