FEFE propone las siguientes nuevas actividades que pueden realizar las oficinas de farmacia:
1.- Preferencia por la dispensación de todos los medicamentos en las farmacias, en vez de los hospitales por cercanía a domicilio, infraestructura material y profesional ya disponible. Enrique Granda editor del Observatorio señala a este respecto que “Creemos que debería ser un criterio objetivo de salud pública, utilizar a las farmacias que son más cercanas, y disminuir el riesgo de contagio en los hospitales con acumulación de personas y visitas evitables”.
Las farmacias se coordinan ya tecnológicamente con las administraciones desde hace mucho tiempo, tenemos la receta electrónica. Incluso, la administración puede conocer de primera mano los tratamientos de los pacientes a través las oficinas de farmacia de los hospitales propios y del sector privado, ya que el consumo hospitalario sigue siendo una incógnita.
2.- Hay que impulsar una revisión del status de la farmacia para modernizarla, para que forme parte de la atención primaria, para hacer muchos más servicios sanitarios y mejorar en verdad esa parte de la sanidad con programas sobre tensión arterial, frecuencia cardíaca, analíticas sencillas, incluso protocolos clínicos para indicar consulta médica o especializada. Detectar asimismo distintas alertas, ya somos un verdadero sensor de salud pública de la propia sanidad española, tanto pública como privada.
3.- Iniciar campañas de vacunación en las farmacias como en el resto de los países de referencia. Sin ir más lejos, ya podríamos estar haciendo la toma de muestras para test de coronavirus y realización de los test rápidos en las farmacias, todo con el fin de disminuir el riesgo evidente de contagios del personal en los hospitales y de hacer más eficiente toda la iniciativa de provisión doméstica que tenemos que afrontar, teniendo en cuenta que los servicios domiciliarios han venido para quedarse.
Caída drástica de las ventas
Por otra parte, el Observatorio destaca respecto a las ventas en farmacias que la pandemia disminuye en intensidad en el mes de mayo, como se demuestra a través de los datos facilitados por el Ministerio de Sanidad. En esta situación las ventas de las farmacias disminuyen significativamente en el mercado financiado y en el total, debido sin duda a la falta de disponibilidad presencial en los centros de atención primaria.
El seguimiento del gasto en mayo indica que se produce una evolución negativa de las ventas tanto en lo que se refiere al mercado financiado y al total, ya permanece por debajo del mismo mes del año 2019. Los datos de consumo público de medicamentos en el mes de mayo de 2020 ponen de manifiesto que el mercado financiado cae de forma espectacular, solo comparable a la imposición de copagos en el año 2012. El mercado total disminuye un -10,8% en valores y un -13,9 en unidades.