El objetivo de esta iniciativa es doble. Por un lado, seguir recordando el impacto de los medicamentos genéricos a nivel no solo sanitario, sino también social y económico.
Baste recordar que, por citar un ejemplo, desde su incorporación al mercado farmacéutico español en 1997, los medicamentos genéricos han proporcionado al Sistema Nacional de Salud (SNS) un ahorro medio de más de mil millones de euros al año. Este ahorro ha permitido al sistema sanitario disponer de más recursos económicos para mejorar los servicios de diagnóstico, ayudar a cubrir los costes de medicamentos innovadores, colaborar en la creación de nuevas infraestructuras, ampliar la cobertura a personas que, en otras circunstancias, no podrían realizar un tratamiento, facilitar el acceso a fármacos esenciales a una mayor proporción de la población…
Además de aliviar la factura del gasto farmacéutico público y mejorar el acceso de los pacientes a los tratamientos con unos precios más competitivos, los medicamentos genéricos también han contribuido positivamente al desarrollo del tejido industrial español y al crecimiento de nuestro producto interior bruto. Actualmente, el sector da trabajo a treinta y cinco mil personas de forma directa e indirecta; destina un 3,5 por ciento de su facturación a inversión en innovación; su exportación media es de un cuarenta por ciento; y colabora con la productividad nacional. De cada diez medicamentos genéricos que se consumen en nuestro país, siete se fabrican en España.
Por otro lado, la campaña quiere reconocer y poner en valor el compromiso social de los ciudadanos cuando eligen medicamentos genéricos.