De hecho, según datos del Grupo Cofares, en las zonas costeras, durante los meses de verano, se estima que las farmacias pueden facturar entre el 30% y el 60% de su volumen anual. Mientras, en las capitales de provincias de interior, la actividad comercial de las oficinas de farmacia “puede disminuir hasta en un 25%”. A pesar de la caída de las ventas, menos del 10% de las oficinas cierran durante estos meses.
Respecto a las tendencias de consumo en las farmacias, se encuentran ciertas diferencias en los productos más solicitados debido a que en los meses estivales surgen patologías que no se dan en otras épocas del año: aumenta la venta de productos analgésicos, oftalmológicos y antinflamatorios; mientras que descienden los fármacos para la trombosis y los antiasma.
Dentro de los productos OTC, se observa un cambio de comportamiento de los fármacos desfinanciados para dolencias leves. También se aprecia un crecimiento de las ventas en productos para dietas, inflamaciones musculares y colirios; mientras que descienden los antigripales y los destinados a combatir la tos.
La distribución adaptada a las necesidades
Para que las oficinas de farmacia puedan dar respuesta a los cambios en la demanda, el Grupo Cofares, adapta su actividad y adecúa su servicio a las necesidades y circunstancias de cada zona. Además, se refuerzan de forma especial las actividades en los almacenes en las zonas costeras, se aumentan plantillas y rutas de reparto para atender el incremento de demanda en dichas zonas. Ejemplo de ello, es la reciente apertura del nuevo almacén del Grupo en la localidad granadina de Motril que inició sus actividades y rutas de reparto al inicio del mes de julio.