El virus respiratorio sincitial (VRS) es la principal causa de infecciones de vías respiratorias inferiores como la bronquiolitis y neumonía en niños menores de 1 año. En España, este virus provoca el 80% de las bronquiolitis, una infección pulmonar común en bebés y niños pequeños que causa inflamación y congestión en los bronquiolos del pulmón. La mayoría de los casos son leves y suelen solucionarse tras pocas semanas sin tratamiento, pero en otros puede agravarse la dificultad respiratoria y requerir hospitalización.
La evolución de la enfermedad causada por el VRS es impredecible. Existen ciertos factores de vulnerabilidad en algunos niños, como haber nacido prematuramente o tener enfermedades crónicas, de tipo cardíaco o respiratorio, que condicionan un mayor riesgo de hospitalización o de ingreso en unidades de cuidados intensivos pediátricas (UCIP). Sin embargo, este riesgo también se extiende a todos los niños, pues en España el 98,3% de los menores de 1 año hospitalizados por VRS son lactantes nacidos a término y sanos; de la misma manera, 3 de cada 4 ingresos en la UCIP ocurren en niños sin factores de vulnerabilidad.
“Este virus afecta a niños completamente sanos. Los menores de 6 meses son los que, sobre todo, se pueden poner muy malos y requerir hospitalización, algunas veces incluso en cuidados intensivos. Adicionalmente, los niños que tienen cuadros serios y que son ingresados tienen después un mayor riesgo de padecer episodios similares durante los primeros años de vida, así como de desarrollar asma a largo plazo” así lo explica la Dra. Cristina Calvo, jefa de sección del Servicio de Pediatría, Enfermedades Infecciosas y Tropicales del Hospital Universitario La Paz, de Madrid, y presidenta de la Sociedad Española de Infectología Pediátrica (SEIP)
La infección por VRS también está asociada a una mayor incidencia de otitis y rinitis alérgica, además de asma y con un uso excesivo de antibióticos. Asimismo, los niños hospitalizados por esta causa es más probable que presenten sibilancias, un sonido agudo parecido a un silbido en la respiración del bebé.
Un virus muy común que afecta durante los primeros años de vida
El VRS es altamente contagioso y se suele transmitir con más frecuencia en las guarderías y colegios, debido al contacto estrecho entre los niños. Un 33% de los contagios a bebés que aún están en casa, se producen a través de hermanos y/o primos ya escolarizados. De hecho, la incidencia de VRS es casi el doble en niños con hermanos que en hijos únicos12. Por ello se estima que el 90% de los niños habrán sido infectados por VRS durante los dos primeros años de vida8. En España, las infecciones originan anualmente entre 15.000 y 20.000 visitas pediátricas de urgencia13 y de 7.000 a 14.000 hospitalizaciones14. Casi el 54% de los menores de un año15 hospitalizados por VRS habían nacido entre abril y octubre, cuando enfrentaron su primera temporada de VRS y la mayoría ingresó sin un historial previo de vulnerabilidad. A pesar de la gran cantidad de casos que se registran cada año, el VRS todavía es un gran desconocido para la mayoría de los padres, quienes están más familiarizados con la bronquiolitis que con el virus que la provoca.