Manolis Kogevinas, uno de los organizadores del encuentro y director del Centro de Investigación en Epidemiología Ambiental de Barcelona (CREAL), ha explicado que ya hay evidencias de los efectos de las radiaciones no ionizantes de los móviles. Los últimos estudios en los que se clasificaron a los móviles como posibles cancerígenos los publicó hace poco la Organización Mundial de la Salud (OMS), pero en este Congreso se va a presentar el protocolo de un nuevo estudio que financiará la Unión Europea, con una aportación inicial de 3,5 millones de euros. El estudio, denominado Mobi-Kids y coordinado por CREAL, servirá para identificar el riesgo de cáncer cerebral en personas jóvenes, adolescentes y jóvenes adultos, debido al teléfono móvil.
Según Manolis Kogevinas, hay que tener en cuenta que los niños, al tener el cerebro más pequeño que un adulto, pueden ser más susceptibles a estas radiaciones que los mayores. Este trabajo pretende precisar esto datos estudiando más de 5.000 niños, con cáncer y sanos, en una veintena de países europeos, entre ellos, Italia, Dinamarca o Alemania. En España participarán niños de Barcelona, Madrid, Valencia y Andalucía. El objetivo es evaluar, con la exposición que tienen al teléfono móvil, las posibles consecuencias que pueden tener, aunque ahora muchos menores tienen móvil y su exposición a las radiaciones es mayor. También se hablará de la relación del medio ambiente con el crecimiento y el desarrollo de los niños desde que está en el seno materno.
Este investigador ha insistido en que la repercusión del entorno de los niños por exposición a pesticidas o a metales como el plomo tienen efectos desastrosos, aunque ha reconocido que siempre ha habido contaminantes ambientales. Ahora hay agua con menos microbios pero con más contaminantes químicos que hace años, cuando había más contaminación atmosférica, pero el gran cambio con respecto a hace dos generaciones es el cambio climático global, que ha hecho cambiar, incluso, a los microbios y hacer que aparezcan enfermedades como la malaria en zonas que antes no tenían ese problema.