La vitamina D, que en realidad es un sistema hormonal (el sistema endocrino de la vitamina D), ejerce un importante papel en el sistema inmunitario al actuar como modulador tanto de la inmunidad innata como de la inmunidad adquirida. Esto explica la relevante asociación que se ha establecido entre el déficit de vitamina D y la aparición o incidencia de múltiples enfermedades reumáticas, como la artritis reumatoide (AR), el lupus eritematoso sistémico, la espondiloartritis, la polimialgia reumática y la artrosis. “Incluso, se ha descrito también que los pacientes con niveles más bajos de 25-hidroxivitamina D pueden tener formas más severas de estas enfermedades”, explica el Dr. Enrique Casado, especialista del Servicio de Reumatología del Hospital Universitario Parc Taulí de Sabadell (Barcelona).