Los sistemas de salud en Europa necesitan ser revisados, este parece ser el mensaje de los europeos se extrae de los resultados de la décima edición del STADA Health Report, hoy presentado en Roma. Con una cifra global del 56%, la satisfacción con los sistemas sanitarios ha caído a un mínimo histórico, lo que muchos consideran una invitación a actuar: ejercicio regular, una dieta saludable y actividades para apoyar el bienestar mental son algunas de las medidas que han adoptado los ciudadanos europeos para compensar las debilidades del sistema y cuidar de sí mismos. Pese al dato global europeo, este estudio muestra que en España la satisfacción con el sistema de salud se mantiene en un 71% de la población, cifra que sitúa al país entre los cinco primeros de Europa, por detrás de Bélgica, Suiza, Dinamarca y Austria.